Son muchos los ejemplos de gente que ha triunfado con un negocio on line, pero no tienes que ser un genio de la tecnología para triunfar en línea.
Por eso vamos a compartir contigo unos ejemplos de negocios on line, con los que ganarlas dinero fácilmente.
1. Entrenador físico.
Si te gusta ejercitarte y tienes conocimientos de fitness y nutrición, puedes ofrecer tus servicios como entrenador personal. Crea una página web y ofrece la posibilidad de personalizar las rutinas y planes de alimentación, según las necesidades de cada cliente. Puedes recurrir a Skype para dar asesorías desde tu casa y cobrar por medio de transferencias bancarias.
2. Redactor de contenidos.
¿Te gusta escribir y tienes algo que decirle al mundo? Crea un blog en el que publiques contenido original y difúndelo por redes sociales. En la medida de que aumente el tráfico al sitio, puedes comercializar espacios publicitarios, pero la tirada principal es que puedas trabajar desde casa redactando notas para otros sitios web.
3. YouTuber.
¿Conoces a algunos de ellos? Todos ellos encontraron en YouTube la oportunidad de difundir un mensaje y hoy son grandes personalidades a quienes las marcas buscan para promocionar sus productos, pero eso sí, el promedio para comenzar a recibir dinero por tus videos está en los 3.5 años de trabajo constante en dicha plataforma.
4. Diseño de apps.
Estas herramientas son el pan de cada día. Las usamos para todo y en cualquier momento, así que, si tienes conocimientos de programación, puedes crear un negocio dedicado exclusivamente para diseñar aplicaciones. Hoy es uno de los empleos más demandados.
5. Ventas.
En vez de crear una plataforma como Mercado Libre o Amazon, puedes montar una tienda virtual en redes sociales, como Facebook y Pinterest. En la medida de que tus productos impacten a los usuarios de estas plataformas, comenzarán a diseminarse y ganarás más clientes.
APLICACIÓN:
Dijo en una oportunidad el sabio Salomón: En todo trabajo hay ganancia, pero el vano hablar conduce solo a la pobreza. Proverbios 14:23
Como mujeres no podemos estancarnos ni vivir vidas conformistas y mediocres. Dios nos ha dado dones y talentos para poder alcanzar aquellas metas y todo lo que nos propongamos y deseemos a nivel personal y familiar.
No nos olvidemos tampoco de que nuestro trabajo puede ser muy útil en la obra del Señor.
Así que involucrémonos también en todo lo que tenga que ver en ese propósito.