¿Cómo está tu vida últimamente? Tienes en orden tus prioridades? Cuáles son las cosas que tienes en mente como lo más urgente? Hoy compartiremos contigo una reflexión que nos dejara grandes enseñanzas al respecto:
Cuenta la leyenda que una mujer pobre con un niño en sus brazos pasó delante de una caverna y escuchó una voz misteriosa que desde adentro le decía: «Entra y toma todo lo que desees, pero no te OLVIDES DE LO PRINCIPAL. Debes tener en cuenta que al salir, la puerta se cerrará para siempre. Por lo tanto aprovecha la oportunidad, pero no te OLVIDES DE LO PRINCIPAL…..»
La mujer entró en la caverna y encontró muchas riquezas. Fascinada por el oro y las joyas, dejó al niño en el piso y comenzó a juntar todo lo que podía. La voz misteriosa habló nuevamente: “Tienes solo ocho minutos» Agotados los ocho minutos, la mujer, cargada de oro y piedras preciosas, corrió hacia fuera de la caverna y la puerta se cerró…. Recordó que el niño había quedado en ese lugar y la puerta estaba cerrada para siempre.
Las riquezas duraron solo 8 minutos. La desesperación y la angustia por siempre.
¿Qué es lo que podemos aprender de esta historia? Muchas veces nos ocurre lo mismo a nosotros. Tenemos la vida limitada a unos pocos años en este mundo y la voz de Dios siempre nos advierte: “NO TE OLVIDES DE LO PRINCIPAL”
¿Qué es para ti lo principal? … Dios, los valores espirituales, el amor hacia nuestra familia, nuestros amigos y una vida llena de fe y esperanza. Pero la ganancia, la riqueza, los placeres materiales nos fascinan tanto que lo principal siempre se queda a un lado. Así agotamos nuestro tiempo aquí en la tierra y dejamos a un lado que son los tesoros del alma.
Dejemos a un lado todo aquello que no forme parte del plan esencial de Dios para nuestra vida y nuestra familia. Es momento de comenzar a dar pasos que reflejen que tenemos a un Dios viviendo en nuestra vida. No podemos malgastar nuestro tiempo en cosas que solo son pasajeras.
Desacomodémonos un poco a ese tipo de vida que nos hemos acostumbrado a llevar en donde nos involucramos y nos esforzamos poco.
APLICACIÓN:
Recordemos finalmente las palabras del apóstol Pablo cuando dijo: Efesios 5:15- 16. Así que tengan cuidado de cómo viven. No vivan como necios sino como sabios. Saquen el mayor provecho de cada oportunidad en estos días malos.