María Clara nos ha escrito desde Lima Perú y nos hace la siguiente consulta:
Mi esposo perdió su trabajo desde hace unos 3 meses y desde entonces en espera de una respuesta para un nuevo trabajo no hace nada más que permanecer dentro de casa.
¿Díganme que debo hacer pues no soporto verlo sin hacer nada?
Si estás pasando por situaciones como esta pon p=mucha atención a las siguientes recomendaciones:
1.- Hablar. Dile que necesitas que se ponga a trabajar, que es urgente para el bienestar económico de la familia.
2.- No lo hagas todo tú. Expresa tus necesidades, si llegas cansada del trabajo pídele de favor que te ayude a hacer algunas cosas, por ejemplo «ya no tuve tiempo, ¿me puedes ayudar en esto?».
3.- Aprende a hablar en el momento indicado. Si te la pasas quejándote todo el tiempo él se acostumbrará y después de un tiempo dejará de prestar atención e intentará evitarte.
4.- Hablen juntos sobre los gastos del hogar. La discusión sobre las finanzas del hogar se discuten abierta y libremente, sin ocultar nada. Paguen deudas y aprendan a vivir de acuerdo a sus ingresos.
5.- Establezcan horarios. La persona sin desempleo debe tener un horario para realizar tareas del hogar y otro horario para dedicarse a buscar empleo, es mejor si alterna las actividades cuando se logren algunas entrevista de trabajo.
6.- Dividan tareas de forma justa. Es hora de dejar el machismo a un lado. Las tareas del hogar deben realizarlas los dos. Sería injusto permitir que ella si esta empleada llegue a casa a realizar las labores domésticas.
7.- Diálogos y estrategias. Cada quien tiene sus propios problemas, uno en su trabajo y el otro con sus problemas de buscar trabajo, comuníquense y hablen de sus problemas, escúchense uno al otro y sean comprensivos, planeen juntos la resolución de problemas, trabajen en equipo.
APLICACIÓN:
Recordemos las palabras del sabio Salomón cuando dijo: “Pobre es el que trabaja con mano negligente, más la mano de los diligentes enriquece” Proverbios 10:4