Hola que placer acompañarte.
¿Eres de aquellas mujeres que se la pasan revisando constantemente el celular de su cónyuge?
Según algunas estadísticas la intimidad está en crisis, de eso no hay duda. Las redes sociales han redefinido nuestra forma de ver el mundo y esto también ha afectado las relaciones amorosas.
Revisar el celular de tu pareja puede ser una oferta tentadora, pero debes tener mucho cuidado. Vamos a darte a continuación razones por las que no deberías revisar el celular de tu pareja:
1. La suspicacia o sospecha nos pone en alerta ante probables acciones desleales. Comunícale a tu pareja tus dudas y traten juntos de resolver el tema.
2. Los celos dañan la relación. No te conviertas en un detective tratando de buscar las pruebas que lo incriminan. Cualquier dato puede ser malinterpretado, generando más conflicto.
3. Es posible que te enojes contigo si no encuentras nada. La ineficacia en tu búsqueda te lleva a redoblar la apuesta hasta convertirla en una obsesión.
4. Por cada acción de revisar te estás perdiendo algo de tu propia vida.
5. No dejes que los pensamientos intrusos y la desconfianza te apresen, al final vas a terminar perdiendo tu libertad.
6. Las acciones que resultan de los celos afectan más la propia estima que el sentirte traicionada. Cada vez que se viola la intimidad del otro estás devaluando tu valoración personal.
7. Los acuerdos del tipo «yo le doy el celular para que lo revise» no sirven. La confianza no se recupera cediendo derechos.
8. La comunicación abre puertas, la obsesión celosa las cierra.
9. Una relación saludable no se sostiene con acciones invasivas, se sostiene con el respeto, la confianza y la comunicación sincera.
APLICACIÓN:
Dijo en una ocasión el apóstol Pablo que los celos son obras de la carne. Si hay algo que debemos cultivar en nuestro matrimonio es la confianza, pues la desconfianza va destruyendo poco a poco la relación, más la confianza la fortalece. Que los celos en el matrimonio no se conviertan en la razón de una dolorosa separación o de errores que pueden costarnos mucho en la vida.