A nivel general nadie quiere vivir con sus suegros, pero a veces no puedes evitarlo ya sea por razones económicas o por ser un matrimonio muy apresurado, por ahora no tienes otra alternativa, pero hoy queremos compartir contigo algunas razones para que consideres seriamente no vivir con tus suegros
1.- Debes de seguir sus reglas. Estando en casa de los suegros debes de seguir las reglas impuestas por este par, no te mandas solo y tus opiniones no son tomadas en cuenta. No puedes hacer lo que a ti se te plazca. Algo muy frustrante si gustas de escuchar música de metálica a todo volumen, o cocinar, inclusive si te gustar andar en pijama todo el día.
2.- No cambias. Uno de los cónyuges, el que es dueño de la casa, bueno sus papás, no asume su matrimonio y sigue con sus costumbres de siempre, su misma rutina y a su pareja puede llegar a verla como una invitado, esto no ayudara en nada y afectara al matrimonio con el paso del tiempo.
3.- Se meten en tus asuntos. No hay privacidad o la necesaria, así que todo se sabe dentro de la misma casa, desde una pelea, hasta si estuviste llorando o gritando. Ante esto ellos se sienten con el derecho de opinar o de decir que es lo que se debe hacer, cuando esas decisiones solo le corresponden al matrimonio. Los suegros nunca estarán conformes, siempre encontrarán un defecto en la pareja.
4.- Te critican. Si no haces lo que para tus suegros está bien, serás víctima de sus críticas y hasta regaños y reproches. Y solo por estar compartiendo el inmueble te verás obligado a realizar esas cosas como ellos quieren para evitar peleas.
5.- Niños mal educados. Si ya tienes hijos, tus suegros los verán cómo propios y si, los consentirán mucho, pero al mismo tiempo los van a malcriar y cuando tú quieras resolver algo con ellos, ya sea que les des un regaño o algo parecido, tus suegros te lo impedirán.
APLICACIÓN:
Recordemos finalmente las palabras del salmista cuando dijo: Salmos 34:19 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
19 Muchas son las aflicciones del justo, Pero de todas ellas le librará Jehová.
Si has pasado por malos momentos en la casa de tus suegros y tal vez estas muy desanimada, el Señor conoce los deseos de tu corazón.
Como pareja busquen la mejor manera de independizarse y si han habido inconvenientes o algún tipo de malentendido con tus suegros pónganse a cuentas con ellos. De esa manera estaremos realmente obedeciendo y agradando a Dios.