Hola, gracias por compartir este tiempo junto a nosotras. La diabetes como cualquier otra enfermedad puede aparecer en cualquier momento de nuestra vida. Por eso es importante que conozcas las señales tempranas de la diabetes para poder identificarla desde sus inicios y evitar problemas en el futuro. Compartiremos contigo a continuación algunos de sus síntomas:
1. Mucha sed y necesidad de orinar frecuentemente.
Ambas cosas son de las primeras señales típicas de la diabetes. La razón: si tienes diabetes, el exceso de glucosa o azúcar en la sangre se acumula, y tus riñones se ven obligados a trabajar más de lo normal para filtrarlo y absorberlo. Si tus riñones tienen dificultades para controlar los niveles elevados de azúcar, el exceso de glucosa se expulsa a través de la orina junto con los líquidos extraídos (que se sacan) de los tejidos. Eso te hace orinar con más frecuencia, lo que puede provocar deshidratación. Y mientras más líquidos bebas para calmar la sed que sientes, más orinas.
2. Fatiga.
Otro de los primeros síntomas de la diabetes es la fatiga sin motivos aparentes. La causa principal de esa fatiga o cansancio es que el cuerpo de un diabético no tiene la insulina que necesita para que el azúcar en la sangre entre en las células, en donde se convierte en energía. Sin la energía que sirve de combustible para que el cuerpo pueda funcionar, la persona se siente extremadamente cansada.
3. Pérdida de peso.
Un síntoma de la diabetes que también se puede presentar al inicio es la pérdida de peso sin motivos aparentes. Si orinar con frecuencia te hace perder glucosa, junto a ella también pierdes calorías. A la vez, la diabetes puede impedir que el azúcar que consumes con los alimentos llegue a tus células para convertirse en energía. Si padeces de diabetes probablemente tengas mucha hambre. El resultado de esta combinación es una pérdida de peso que puede ser rápida, sobre todo si tienes diabetes de tipo 1.
APLICACIÓN:
No seas sabio en tu propia opinión;
más bien, teme al Señor y huye del mal.
Esto infundirá salud a tu cuerpo
y fortalecerá tu ser. Proverbios 3:7-8
Seamos sabias a la hora de desarrollar hábitos que nos ayuden a mantenernos saludables en todo tiempo. Pero también apartémonos del mal esto infundirá salud a nuestro cuerpo y nos fortalecerá.