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No puede existir peor situación para la familia que la de un hombre sin empleo, ya que este panorama deja al descubierto los sentimientos «ocultos» del varón, además de crear algunos conflictos dentro del hogar. Hoy compartiremos contigo algunos consejos para poder sobrellevar de la mejor manera esta situación:
1. Roles marcados. Cuando el varón pierde su trabajo, obviamente necesita apoyo de la esposa, ya que, la pareja tiene que ser un soporte emocional en todo momento. Perder el empleo, es un proceso frustrante y doloroso. Se puede caer en un cuadro depresivo y de desesperación según explican los expertos
“Tal vez sean momentos difíciles, pues culturalmente los roles de ambos están encasillados y además siempre ha existido esa lucha de poderes. Pero también, el hombre puede ayudar en la casa. «Debe dejar de un lado el machismo y dedicarse también al cuidado de los hijos, ya que tampoco será algo permanente y no lo hace menos hombre», sostienen los expertos
2. Apoyo mutuo. Una relación de pareja es entre dos, si uno cae el otro lo levanta. Siempre es importante dialogar, ninguno de los dos debe menospreciar al otro por ganar más o menos. La clave está en el apoyo mutuo, porque además son un equipo.
«Ahora bien, si él se está encargando del hogar y ella del sustento económico, es necesario que como compañera lo apoye y anime hasta que pueda recuperarse y encuentre un nuevo empleo», finalizan los expertos
APLICACIÓN:
Así ha dicho Jehová: Maldito el varón que confía en el hombre, y pone carne por su brazo, y su corazón se aparta de Jehová. Jeremías 17:5
Bendito el varón que confía en Jehová, y cuya confianza es Jehová.
Jeremías 17:7
Hoy podemos decidir poner el 100% de nuestra dependencia en Dios. El fin de ello será poder experimentar la bendición y provisión de Dios a lo máximo. Al hacer esto cuidaremos nuestro corazón a no apartarse tras otras cosas que al final será la derrota segura. Si deseamos tener las bendiciones de Dios venir a nuestras vidas, es necesario depender en las promesas que Dios nos a hecho. Él no nos fallará, Él vendrá pronto a socorrernos en medio de nuestra crisis. El Señor nos llevará a un lugar de bendición y prosperidad.