Hola que bueno es poder acompañarte una vez más. La realidad es triste pero cierta, estamos acabando con el planeta debido (en gran parte) a nuestro consumo irresponsable. El plástico además de ser uno de los materiales que más tardan en biodegradarse, de 150 a 600 años, es uno de los contaminantes de más producción. Así que hoy queremos darte algunos prácticos consejos para disminuir tu consumo de plástico.
#1 Dile adiós a las botellas de agua. En vez de comprar agua embotellada, usa un termo para trasportarla a donde vayas.
#2 Ten a la mano un juego de cubiertos de metal. Ya sea en tu bolsa o en el coche ten a la mano un juego de ellos, así evitarás consumir desechables.
#3 Guarda los envases de vidrio Los podrás reutilizar para guardar comida.
#4 Cambia las bolsas de plástico por las de tela. Lleva una contigo a donde vayas, esto evitara que sigas consumiendo plástico.
#5 Prefiere los jugos hechos en casa. Los jugos, zumos y otras bebidas también pueden venir envasadas en botellas de plástico. Trata de reemplazarlos por los hechos en casa son más sanos y deliciosos.
#6 Comprar productos a granel. Además de ser más baratos son productos menos procesados y comprarlos así te ayudará a reducir drástica mente la basura que generas. Prefiere los productos empaquetados en cartón o vidrio.
#7 Compra de preferencia productos empaquetados en cartón o vidrio. Siempre que tengas opción, di no al empaque de plástico, aunque sea más barato. Recuerda que el vidrio y el cartón son más fáciles de reciclar.
#8 Evita el uso de popote o pajillas de plástico. Las pajitas de plástico son totalmente prescindibles, sin problema puedes beber directamente del vaso o envase. Su consumo solo daña al planeta.
APLICACIÓN:
Dijo Moises en una oportunidad: “Y los bendijo Dios y les dijo: Sed fecundos y multiplicaos, y llenad la tierra y sojuzgadla; ejerced dominio sobre los peces del mar, sobre las aves del cielo y sobre todo ser viviente que se mueve sobre la tierra.” Génesis 1:28.
Cuando nos llama el Creador a ejercer dominio, esa comisión está ligada a responsabilidad con el medio ambiente. Expresa la necesidad de ejercer una buena mayordomía de todo lo creado. Ser respetuosos del medio ambiente.
Cada vez que arroja papeles en la calle, un vaso de plástico en un parque, una servilleta en un río o quizá una lata de gaseosa vacía en el mar, está contaminando el paraíso maravilloso que Dios creó para que lo disfrutáramos. ¡Es tiempo de cuidar el medio ambiente! Amar a Dios es también cuidar la tierra.