Absolutamente no. Es una blasfemia pensar que el arcángel Miguel es el Señor Jesucristo. Pero leamos el texto en 1 Tesalonicenses 4:16. Para tomar en cuenta el contexto voy a leer desde el 13 al 18. La Biblia dice: Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza.

Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él.

Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron.

Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.

Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.

Por tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras.

En este pasaje bíblico el Apóstol Pablo está anunciando la gloriosa verdad acerca del arrebatamiento de la iglesia. El texto es absolutamente claro en cuanto a que es el Señor Jesucristo en persona quien descenderá de su gloriosa morada hacia las nubes, desde donde llamará a sus redimidos, a la iglesia, para que estén con él para siempre. Los que han muerto habiendo confiado en Cristo como Salvador se levantarán de sus tumbas con cuerpos glorificados, cuerpos adaptados para morar en la gloria celestial. Los creyentes que estén vivos cuando suceda este magno acontecimiento serán transformados y también recibirán cuerpos glorificados y de esta manera, todos juntos, tanto muertos resucitados como vivos transformados, seremos arrebatados para encontrarnos con el Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.

Me imagino que el razonamiento seguido por las personas que piensan que el Señor Jesucristo es el arcángel Miguel es que, como en el texto leído habla del Señor, con voz de arcángel. De aquí entonces, según este errado razonamiento, el Señor Jesucristo debe ser un arcángel, y como la Biblia habla de un arcángel llamado Miguel, se llega a la conclusión equivocada que el Señor Jesucristo debe ser el arcángel Miguel. Pero no hay tal, en el mismo texto se habla de una voz comparable a la trompeta de Dios. Se trata entonces de Dios, no de un arcángel. La diferencia entre Dios y arcángel, es como el día y la noche. Dios es todopoderoso, los arcángeles son poderosos, pero no todopoderosos. Dios es omnisciente, o conoce absolutamente todo, los arcángeles conocen muchas cosas, pero no todas las cosas. Dios es omnipresente, está en todo lugar a la vez, los arcángeles no pueden estar en todo lugar a la vez. Dios es el creador de todo, los arcángeles son seres creados por Dios. La Biblia enseña que Jesucristo es Dios y realmente es una blasfemia contra Dios, afirmar que Jesucristo es meramente un arcángel.