“Ugonote”, nombre con que se designan los que en Francia adoptaron las ideas de Juan Calvino. A pesar de ser muchos y de que entre ellos abundaban los ricos, estos protestantes franceses tuvieron que luchar encarnizadamente para que su secta pudiera subsistir. El origen de la palabra no se ha definido muy claramente.

Algunos la suponen derivada del vocablo huguon, con que se designa en Turena a las personas que transitan de noche por las calles, puesto que los primeros protestantes franceses solían celebrar de noche sus reuniones religiosas. Otros sostienen que el nombre procede de la pronunciación defectuosa de una palabra alemana que significa “confederados”. Otros, en fin, afirman que proviene de los primeros protestantes citados que se reunían en bóvedas subterráneas cercanas a la puerta Hugon, en las afueras de Tours.

El primer templo hugonote fue erigido en 1538 en Estrasburgo, que en aquel entonces no era territorio francés. Los que a él concurrían eran individuos que habían huido de Francia por la persecución religiosa. El movimiento cundió rápidamente. Hoy solo quedan vestigios de tan heroicos mártires cristianos. Uno de sus monumentos todavía se conserva en Francia. Una leyenda esculpida en bronce, al pie de la estatua, reconociendo que la Biblia ha sido capaz de resistir los martillazos de sus críticos, dice así: “Den golpes de martillo, manos hostiles. Sus martillos se romperán pero el yunque de Dios permanece”.

La Biblia es suficientemente fuerte para resistir los golpes de los críticos más severos, es capaz de saciar nuestras dudas, e inspirar la confianza de que Dios ha hablado. Muchos hoy ponen en tela de juicio su veracidad. Atribuyen la existencia de nuestro universo, la amplitud de la inteligencia humana y los sentimientos heredados, a cierto azahar químico o explosión cósmica, como punto de partida de todo lo existente. ¡Qué novelería! Algunos prefieren vivir creyendo que la existencia humana proviene de cierta “sopa de polvo cósmico” que explosionó en algún “agujero negro del universo” en la eternidad pasada. Estos son los que niegan la misma Palabra de Dios que un día les juzgará.

Pensamiento del día:

La iglesia ha crecido y crece sobre la sangre de sus mártires.