¿Conoces personas con un alto concepto de sí mismas? Son los típicos ególatras, esos que sobresalen por mostrarse mejores, superiores y que dicen saber y tener la razón en todo.

La Real Academia Española define la egolatría como el “culto, adoración o amor excesivo de sí mismo”, Es por eso que se manifiestan sus conductas como egocéntricas, vanidosas, altaneras y egoístas.

No es cosa fácil estar al lado de alguien así. Sus sentimientos de superioridad marginan al resto y tienden a menospreciar y criticar a los de su entorno.

Su percepción sobre valorada de sí mismos les hace creer que están por encima de todos lo demás. Sin embargo, todo esto no es ni más ni menos que una máscara que encubre sentimientos de inseguridad, de falta de afecto y de miedo al fracaso y a la frustración. Jesús, tuvo que enfrentarse a muchos de esta clase.

Mientras anduvo humildemente por esta tierra, dejando las señales del Reino de Dios, los arrogantes y altaneros buscaban ocasiones para hacerlo tropezar en sus certezas. Pero el Maestro usaba verdades simples de la naturaleza, para que entendiesen los más complejos principios.

Una vez, por medio de una metáfora agraria les dijo:” De cierto les digo que, si el grano de trigo no cae a tierra y muere, queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto.

En otras palabras, quería que entendiesen que si la semilla no es enterrada en la oscuridad y profundidad de la tierra como si fuera ésta su tumba, nunca se reproduciría. Debe morir para que brote en su primavera. La cruz de Cristo fue el mejor ejemplo.

Si Él se hubiese aferrado a la vida y no hubiese pasado por la crucifixión, no hubiera resucitado para darnos vida a nosotros.

A todos los seres humanos nos cuesta crucificar nuestro ego. Somos propensos al egoísmo. Nos aferramos a nuestras creencias, nuestras necesidades y nuestros puntos de vista. Pero NO es esa la regla fundamental.

Lo naturalmente correcto, es al igual que en la naturaleza, morir al yo para que viva la luz de Cristo en nosotros y así dar fruto en nuestras familias y en nuestra comunidad.

Pensamiento del día:

Sigmund Freud escribió: “Si quieres vivir prepárate para morir”