El miedo o temor es un factor natural  a las emociones humanas. De alguna manera es un mecanismo de autodefensa que nos guarda de exponernos a enemigos potenciales que nos han dañado o pueden hacerlo. Ese mecanismo puesto por el Creador en nuestro interior es bueno porque al vernos desprotegidos e indefensos nos refugiamos en Dios y la comunión se estrecha. Como el niño que ante lo desconocido se abraza a los pantalones de su padre y se esconde detrás de él, así también Dios nos expone muchas veces a situaciones que escapan de nuestro control para tenernos más cerca. “En el día que temo yo en ti confío”, dijo el salmista David. Pero también el miedo puede ser contraproducente si nos paraliza y si acaba con todo intento de iniciar algo nuevo. Temor al fracaso, miedo al qué dirán los demás, a la traición… Las variantes son infinitas si enunciamos focos de temor potencial. Salomón dijo: “El que al viento observa no sembrará”, haciendo alusión al efecto que un posible viento fuerte tenga sobre la semilla al momento de esparcirla sobre el surco labrado en la tierra, y continúa: “y el que mira a las nubes nunca cosechará”, refiriéndose al efecto del agua de lluvia sobre los granos recién guardados en los silos. ¡Nunca harás nada si te pones a calcular todo! Deja espacio para el obrar sobrenatural de Dios. Ese espacio se llama fe. O estás lleno de temores o estás lleno de fe, de ahí radica la diferencia entre una vida de éxito o de inutilidad. El miedoso dice: “No puedo hacerlo”. El caprichoso dice: “No lo haré”. El cómodo: “Que lo haga otro”, pero el hombre y la mujer de fe dicen: “Puedo hacer cualquier cosa que me venga a la mano si cuento con el Dios que me fortalece”.  Un proverbio chino dice: “El que teme sufrir, sufre de temor”. Peligros, sufrimiento, errores y fracasos siempre estarán presentes en la concreción de todo proyecto, pero no por eso vas a desistir. Deposita tu ansiedad en Dios sabiendo que Él cuida de ti mejor que nadie y avanza por la vida encarando nuevos desafíos constantemente, eso te mantendrá vivo, optimista y alegre.

Pensamiento del día:  

El que teme sufrir, sufre de temor.