Hay personas que suelen quedarse con poco pudiendo tener más de parte de Dios y me refiero al hecho de que pueden pedir aquello que Dios en su gracia les confiere, pero a veces no se animan, creen que no son dignos de pedir o que recibieron todo lo que Él podía darles.

La realidad es que Dios nos ha dado todo y mucho más de lo que podamos imaginar; creemos que es irreverencia pedir más a Dios sin embargo podemos contar con más de su gracia para cada mañana, siempre hay pan en su mesa y vino en su vasija, hay ungüento y aceite para tus heridas, hay miel para ti, sólo debes acercarte por un poco más de su gracia para hoy, también hay un café que puedes compartir con Él esta mañana.

¿Qué no te animas pedir a Dios?

¿Puedes sentir su bondad cada día renovada en tu vida?

Escribe algo que hoy te dio de gracia: