Mucho de la Biblia habla de la sabiduría y del necio. La sabiduría es mejor que cualquier arma porque evita las guerras, edifica y no traer daños colaterales. La sabiduría te da la bendición y protección de Dios porque estás viviendo bajo su temor. En cambio la necedad del pecador lleva a destruir todo lo que tiene a su alcance y su onda expansiva llega aun a aquellos que no tienen nada que ver con él. Un hombre necio mató a miles de judíos por años y provocó una guerra mundial, sólo por un corazón endurecido y soberbio.

La Biblia te llama a buscar una y otra vez la sabiduría. La sabiduría deja de ser un atributo y se convierte en una necesidad porque sin ella vamos a destruir nuestras vidas y todo lo que nos rodea. La sabiduría se obtiene de una forma simple: pídele a Dios. Él se complace en dar al que le pide con fe y pide sabiduría, porque es una tierra fértil en la que Dios mismo va a trabajar y sembrar para obtener frutos eternos. Tómate un café con Dios y busca su sabiduría.

¿Mides el impacto de tus acciones a tu alrededor?, ¿Quién eres?