La historia es una vitrina de monumentos derrumbados. Hombres e imperios pasearon sus logros y conquistas ante la vista de todos en actitud desafiante hasta del mismo de Dios. La gran civilización mesopotámica cercana a la llanura de Sinar fue el primer ícono de esta tendencia, al construir la Torre de Babel. Este mega monumento, según nos relatan los primeros capítulos del Génesis, fue erigido con la manifiesta idea de identificarse como elite, protegerse de los demás pueblos e independizarse de Dios. Duró poco, muy poco, Dios se encargó de detener la obra confundiendo sus lenguas. Nabucodonosor es el siguiente de nuestra lista. La Gran Babilonia con sus jardines colgantes fue deseada por todos los conquistadores de turno. Ciro el persa, Alejandro Magno, y otros asentaron allí su sede de gobierno. Pero también le llegó su fin, y aunque Saddam Hussein intentó reedificarla, la obra se detuvo como se detuvo también su vida en una horca común. Más íconos de grandeza humana enajenada de Dios han sido los alemanes con su derribado muro de Berlín, los ingleses y su Titánic hundido, los americanos y sus torres gemelas derrumbadas. ¿Cuándo aprenderá el ser humano que toda estructura sin Dios tiene los días contados desde sus mismos comienzos?
También Dios construye su ciudad, también Él ideó su mega estructura. 2.200 Km. de alto por 2.200 Km. de ancho, por 2.200 Km. de profundidad. ¿No lo crees?, lee más detalles en el libro de Apocalipsis capítulo 21. Este Reino persiste y se revelará muy pronto ante un mundo atónito que lo verá descender desde las nubes. ¿En qué radica su persistencia? en un detalle primordial, todos los otros imperios fueron construidos sobre la base del abuso de poder, el egoísmo, la mentira y la ambición. Sus líderes sólo buscaban su grandeza personal y en los últimos momentos dejaron ver que lo que menos les interesaba era el bienestar de sus seguidores. Con Jesús, el Constructor de esta Jerusalén celestial y su imperio: La Iglesia, los móviles fueron otros. Lo hizo por amor, pensó en los suyos, los amó hasta el fin, tal es así, que vendrá a buscarlos cuando la obra esté terminada.
Pensamiento del día: ¿Cuándo aprenderá el ser humano que toda estructura sin Dios tiene los días contados desde sus mismos comienzos?