Corrie Ten Boom, cristiana Holandesa torturada en los campos de concentración Nazzi, logró sobrevivir para contar su historia al mundo en su libro: ‘El refugio secreto’. Su óptica de aquella circunstancia apremiante fue la clave para la sobrevivencia.

Ella dijo en su libro: “Si miras al mundo, te afligirás, si miras tu interior, te deprimirás, pero si miras a Dios, reposarás.” Lo que debe determinar tus sentimientos debe ser tu enfoque, no tus circunstancias.

El secreto de la paciencia es recordar que tu dolor es temporal cuando tienes la certeza que tu recompensa es eterna. Si logras conservar la paz interior aún cuando afuera ruja la tormenta, al final estarás de pie.

Qué triste es la realidad de muchos en esta vida que regulan su estado de ánimo y aún sus conductas por las circunstancias exteriores adversas o favorables y carecen de esa estabilidad.

Cuando llegas a concentrarte en el plan de Dios para tu vida más que en tu problema, has alcanzado un peldaño superior de tu carácter. Moisés soportó una vida llena de problemas porque tenía la mirada puesta en la recompensa.

El gran apóstol Pablo padeció cárceles, torturas y desprecio, pero dijo: “Lo que sufrimos en esta vida es cosa ligera, que pronto pasa; pero nos trae como resultado una gloria eterna mucho más grande y abundante”.

También José entendió esta verdad cuando le dijo a sus hermanos, que lo habían vendido como esclavo: “Ustedes pensaron dañarme, pero Dios lo encaminó para mi propio bien.”

En el mismo contexto, Dios le dijo a Jeremías “los planes que tengo para ti son planes para prosperarte y no para dañarte, planes que te darán esperanza y un futuro.”

Querido amigo, si aún no posees esta asistencia para aceptar y enfrentar lo adverso, si vives sucumbiendo bajo el peso de las circunstancias y te cuesta remontar vuelo sobre ellas, es porque no tienes ese poder de lo alto que sólo encuentras a los pies de la cruz de Jesús.

Entrega tu vida a Él y aprenderás a disfrutar de la vida paso a paso.

PENSAMIENTO DEL DÍA:

DIOS SABE LO QUE ES MEJOR PARA TI, Y EN SU CORAZÓN, TIENE PRESENTE TUS MEJORES INTERESES.