Qué hermosa esperanza de terminar así los días en la tierra.
Mucha gente teme a la muerte y aun a la vejez misma, no quieren pensar en el hecho de que van a llegar a ser viejos o morir; tienen miedo porque no saben qué va a ocurrir con ellos.
El temeroso de Dios puede encontrar paz, aun en su vejez o su muerte. Porque su esperanza no está en su fortaleza física sino en Dios y su confianza está puesta por la fe en las promesas de Dios.
La fortaleza está en quién depositas tu fe; la felicidad, si vives según eso. Tu conocimiento y relación con Dios determina tu estilo de vida y felicidad. Tómate un minuto para acercarte a Él.