Barcos del Mar Báltico que transportan grandes cargas de mercadería desde una costa del Ártico hasta la otra, utilizan un sistema de contrapeso muy ingenioso para mantener la línea de flote durante la navegación. Llenan las cisternas interiores de la embarcación con el agua del mar para nivelar la nave y simplemente la liberan al llegar a la otra orilla al cargar sus contenedores para mantener la misma línea de flote.

Lo que estos ingenieros hidráulicos no consideraron, es que junto con esas miles de toneladas de agua encerradas en sus cisternas, encerraban también miles de ciertos tipos de medusas propias de ese lado del mar. Allí, esos invertebrados, eran depredadores naturales de algunos microorganismos y así regulaban su población manteniendo un equilibrio en el plancton. Pero al ser transportadas esas medusas en las cisternas y liberadas a varios miles de kilómetros de su lugar, en las costas del frente, no tenían su alimento y atacaron otros microorganismos que formaban la base para la alimentación de las orcas que vivían en esa costa. La costa este, sufrió una alteración de su plancton y miles de ballenas enfermaron y murieron, y la costa norte dio origen a cierto virus producto de la visita de estas medusas que mataron a miles de tortugas marinas. Cuando descubrieron las causas, ya era demasiado tarde.

¿Cuándo comprenderá, el humano que no puede meter sus narices en cosas divinamente coordinadas y que es incapaz de administrar este mundo y aún la vida misma, sin la dirección y el permiso de su Creador? Arbitrariamente actuamos pensando que somos dueños absolutos de todo lo que está a nuestro alrededor, partiendo de la propia vida, nuestro tiempo, dinero, personas, sus almas, el planeta… Muchos hombres se creen dios y deciden sobre sus actos con una actitud déspota, pero la Biblia dice que todos estaremos de pie ante Él dando cuentas. Cada decisión que tomes, cada paso que des, está siendo registrado en los libros del cielo y de ellos tendrás que responder, sea bueno o sea malo.

PENSAMIENTO DEL DÍA:

Piensa en la eternidad al decidir tus acciones en esta vida.