¿Has tomado alguna decisión que ha traído amargura a otros?, yo sí y me temo que volverá a pasar.
Nuestras decisiones muchas veces son en razón de nuestros deseos y planes; y puede que vayan en contra de lo que los demás quieren.

La pregunta que sigue es: “¿debo hacer las cosas para quedar bien con los demás?”. Obviamente la respuesta es ¡No!, pero a veces nuestras decisiones fuera del plan de Dios traen amargura a los que nos rodean.

Nuestras decisiones deben ser tomadas según los parámetros de Dios y no sólo mis deseos. Conocer su voluntad es lo primordial. Necesitas encontrarte con Él cada día, conocer sus deseos, intenciones y las cosas que le desagradan; necesitas un tiempo a solas con Dios cada día.

Tomate un café, un minuto, un momento con Dios.