Dios siempre impulsa el corazón de los hombres a hacer su voluntad. No creas que todo es por ingenio humano; muchas veces hay personas que están orando y de pronto ocurre algo en tu vida, quizás un jefe te ascendió, tus padres te dan permiso para una relación de noviazgo o te dan el dinero o el trabajo para tener lo suficiente para pagar tu universidad. Bueno es Dios obrando y moviendo el corazón de personas a hacer algo que Él tiene en mente.

Dios despierta el espíritu de las personas a que cumplan sus planes. Dios también puede despertar tu espíritu a hacer una gran obra para Él. No te rehúses a seguir el impulso de tu corazón, no le quites el control al Espíritu Santo cuando te mueve a caminar a lo que Dios está haciendo en tu entorno. Dios te quiere usar para ser de bendición a miles de personas, comenzando con tu grupo más cercano. Tómate un café y pregúntale a Dios qué quiere que hagas.

¿Sientes el impulso de hacer algo por alguien?