Si no has pasado por un momento donde todos te atacan y critican, pronto lo harás.

No es por desanimarte, pero la verdad es que en el mundo real siempre hay alguien o algunos que te van en contra y es más común de lo que parece en el ambiente cristiano.

Lo cruel y ruin de la crítica no es que digan que lo que hiciste está mal o necesita mejoras, eso sería bueno si lo dijeran.

Lo realmente despiadado es que atacan a tus sentimientos, tu alma, te desmoralizan e intentan hacerte sentir que no eres nada.

La crítica trata de acabar con tu deseo de continuar, de ofrecer sacrificios gratos a Dios.

La razón es la ira, cuando alguien hace algo novedoso, la envidia o el desacuerdo produce ira y la primera acción que toman es el escarnio y atacan a tu alma.

Puede que nunca hayas pasado por el escarnio de la gente o no sabes cómo salir de ahí, lo triste realmente sería que tú seas uno de los que hacen escarnio de los demás.

Cuida tu lengua y tu corazón de herir a los demás simplemente porque no te parece buena idea lo que hacen.

Recuerda que Dios está juzgando sobre ambos y Él es capaz de resucitar de los montones del polvo a las piedras que fueron quemadas, yo soy un testimonio de eso.

Tómate un café con Dios y habla sobre esto con Él.

¿Cómo manejas la crítica? Compártenos.
¿Te enoja que otros hagan cosas y tú no?
¿Te has sentido herido por lo que dicen de ti?